viernes, 3 de abril de 2015

De las Medinas a Alba de Tormes: Las Edades del Hombre desde 2011.


Aunque la exposición de Las Edades del Hombre 2015 tenga un carácter excepcional en atención al evento que conmemora, el V Centenario del nacimiento de Santa Teresa, y su trascendencia y difusión no permita realizar comparaciones con las exposiciones que han comprendido el último ciclo de las muestras de arte sacro de la Fundación Edades del Hombre (2011-2014), tras la visita a las sedes de Ávila y Alba de Tormes (Salamanca), en esta segunda localidad, las sensaciones que hemos tenido nos han hecho recordar el importante papel que han jugado las exposiciones para dar a conocer el medio rural y el patrimonio que el mismo acoge: "Passio" en las Medinas (Medina del Campo y Medina de Rioseco-2011), "Monacatus" en Oña (Burgos-2012), "Credo" en Arévalo (Ávila-2013) y "Eucharistia" en Aranda de Duero (Burgos-2014).


La implicación de las autoridades y empresarios locales, así como de la población en general (basta con señalar por ejemplo el papel de los voluntarios que facilitan información "in situ" a los visitantes) ha sido una de las características de las últimas cuatro ediciones, y sin querer restar importancia a la exposición que albergan las sedes de la capital abulense, el recorrido por las calles de Alba de Tormes nos ha transportado, en cierto modo, al año 2011, cuando los visitantes descubrían la localidad de Medina de Rioseco y comentaban su sorpresa ante los recursos patrimoniales que estaban conociendo y la belleza de su entorno (el viaje en barco por el Canal de Castilla fue una de las actividades complementarias que más agradó a los visitantes de "Passio" en Rioseco).


Alba de Tormes cuenta en primer lugar con una ubicación que permite el desplazamiento, si el visitante así lo desea, bien a Salamanca capital, bien a otras poblaciones merecedoras de ello, como puede ser Peñaranda de Bracamonte, pero para que así sea, el viajero ha de contar con tiempo suficiente, ya que Alba de Tormes por sí misma, tiene atractivos suficientes para dedicarle una jornada completa.


El Monasterio de la Anunciación, la Plaza Mayor, la iglesia de San Juan, el increíble Museo Carmelitano (imposible dejar de visitarlo), la exposición del escultor Venancio Blanco, la presencia arquitectónica e histórica de la Casa de Alba en la localidad, o el río Tormes, son entre otros, lugares y motivos que, junto con la visita a la Basílica de Santa Teresa, sede de la exposición de Las Edades del Hombre, hacen que el tiempo pase imperceptible en Alba de Tormes.























Pero además la vinculación de la localidad con la figura de Santa Teresa se aprecia en muchos aspectos: la presencia de locales gastronómicos y comerciales que ofertan productos y recuerdos, la decoración de las calles con motivos propios del V Centenario de su nacimiento, la cordialidad de sus gentes, o el excepcional conocimiento que algunos de ellos tienen sobre la vida de Teresa de Jesús, como el padre carmelita Manuel Diego Sánchez.


          



En el centro el carmelita Manuel Diego, con un matrimonio de Alba de Tormes, Rafael y Paqui.



Otras localidades con no menos méritos, esperan con ansia poder dar a conocer también en los próximos años sus recursos patrimoniales y las posibilidades del medio rural, a través de la exposición de Las Edades del Hombre: Toro (Zamora), Béjar (Salamanca), Frómista, Carrión de los Condes y Aguilar de Campoo (Palencia), Cuéllar y el Real Sitio de San Ildefonso (Segovia), Valencia de Don Juan y Sahagún (León), Almazán y Ágreda (Soria), Miranda de Ebro (Burgos), etc.

0 comentarios:

Publicar un comentario